miércoles, 7 de octubre de 2009

CAPITULO V "Buscadme al torero por tierras y cielos..."



"S"

La Duquesa, mirando las desorbitadas cuencas de los ojos del resto de comensales, dió un tiron con ambas manos de los encajes blancos que adornaban su escote y les indicó que podía comenzar a comer.
La sopa de liebre y los torreznos sumergidos en ella, hacían sospechar a don Victor sobre la procedencia de aquella dura carne, mientras otro de los caballeros se mofaba de él sugiriendole que más bien parecía gato aquello que estaban comiendo, mientras que el caballero que encabezaba la expedición rechazaba el plato y solicitaba simplemente a Buttarelli, un par de huevos fritos para contentar su hambriento estómago.
La Duquesa de Piedrabuena, inquieta, no dejaba de mirar hacia la puerta esperando la entrada del torero a la vez que mordisqueaba compulsivamente unos rabanitos que doña Rosario había aliñado con pimientos y pepinillos. Cansada de finjir sentirse bien acompañada por aquellos nobles y caballeros, se lanzó en busca de la Carmela, que con mirada de despecho aguardaba en una de las mesas del rincón puesta en pié y apoyando su pie sobre una silla, dejando ver el muslo izquierdo al tener remangada la falda para conquistar clientela.
Al verse arrollada por la dama en cuestión, la Carmela, contestó con prontitud al dicirle que se equivocaba si buscaba favores hacia ella, ya que era muy hembra. La Duquesa, no tuvo por menos que reirse a carcajadas en sus narices replicándole que antes se moriría en un convento que compartir catre con otra mujer.
- Pó no sé de que se rie vuestra mersé, ¿entonse que é lo quiere conmigo? - preguntó, mientras la "Pitones" se ponía de puntillas intentando descubrir desde la otra esquina que se traían entre manos aquella mujeres.-
La Duquesa, buscó en su refajo y sacó un par de monedas de oro que rapidamente la gitana arrancó de sus manos.
- Ahora si que sé lo que busca la dama, si va llevá rasón la "Pitone". ¿a que lo que quiere é una sita con er torero de Triana?-volvió a preguntarle la Carmela, acercándose a su oido.-
La Duquesa, asintió, pidiendo discreción a la fulana argumentando que sentía admiración por el diestro, y que el caballero que la acompañaba era muy celoso y no podía entender que sintiera solo admiración por otro hombre.
- Yá, no se ofenda la señora pero también yo é sentío asmirasión por mushos hombre en mi vía.-explicó.- y conmigo vuestra mersé no tiene que tené cuidao, ¿si jubiese hablao con el pendón que hay allí enfrente? otro gallo cantaría, pero aquí la Carmela -añadió señalandose con ambas manos.- é de lo má discreta que hay en la tierra. Así que ande tranquila que yo localiso ar moso lo ante posible.
A continuación, y tras haber negociado de nuevo a cambio de otras dos monedas una cita con el Niño del Corral cuando los caballeros abandonasen la hostería, la Duquesa volvió a la mesa en la que ya estaban sirviendo los postres. Unas exquisitas gachas en las que el pan frito flotaba en los platos...

12 comentarios:

  1. PAN FRITO EL QUE LE VAN A DAR AL NIÑO ENTRE TODAS...LA PITONES Y LA CARMELA ENFADADAS,QUE PELIGRO MADRE MIA!!!!!!

    ¿SEGURO QUE LA SOPA ES DE LIEBRE? JAJAJAJJJ...

    BESITOS!!!!!

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  2. SALMORELLIIIIIIIII, ¡QUÉ RAPIDEZ HOMBRE! ¡NO LO PUEDO CREER! JAJAJAJA

    ¡PERO CÓMO ME HAS DEJADO A LA DUQUESA SIN ENCAJES, QUE SI CON ENCAJES EL ESCOTE LE LLEGABA AL OMBLIGO, SIN ELLOS LE LLEGARÍA A LA RODILLA! JAJAJAJA

    GENIAAAAAAAAAL.

    BESOS.

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  3. MARITA, MEJOR NO PREGUNTAR... A VER SI TODAVÍA SE ENCUENTRAN CON OTRO DEDO DE BUTTARELLI, JAJAJAJA

    BESOTES REINA.

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  4. Umm, me quedo con las gachas, que rico, que buenos tiempos aquellos, hermosa entrada, saludos.

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  5. BUuuuuaaaaahhh... Salmorelli, ayer deje un comentario y no ha salido, he sido traicionada por mi ordenador !hay que ver!, en fin, vuelvo a ello: mira que venir en la comitiva na mas y na menos que la duquesa, y encima pidiendo guerra !ya la tenemos! pues, menuda se va a montar entre la Carmen, la Pitones, la Duquesa -con piojos, supongo- el Niño el Corral, y el don Victor, que veremos a ver por donde nos sale... a tope de animación está la hostería, por dios

    Esperando acontecimientos - que dicho sea de paso, estoy segura serán jocosos- quedo, y mandando un beso gordisimo al genial autor me despido

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  6. Veo que la duquesa se vino tremendaaaaaaaaa, si ya comenzó a arrancarse los encajes no me imagino lo que se arrancará luego... jajajajaja

    ¡OLEEEEEEEEEEEEEE!

    Ya me puse al día con la lectura, ahora no me hagan esperar tanto, please.

    Besos.

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  7. apm, a no desesperarse, lo que vale es la intención.... ya veremos cómo se resuelve este asunto de polleras y caballeros.
    Además en esta hostería no se le hace asco a ná de ná, ni a los piojos ni al guiso de la Rosario....Jajajajaja

    Mil gracias de parte de Salmorelli y mío.

    Besotes inmensos.

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  8. Muy bien por ponerte al día Nirvana, es que al paso agigantado que van llevando los capítulos, luego te ibas a tener que leer una novela...

    ¿Qué se arrancará la duquesa? A leer para enterarse. Jajajaja

    Cariños.

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  9. ¡Menuda sociedad, la Carmela y la Duquesa! Ya estoy palpitando unas escenas para descojonarse. Jajajaja

    Felicitaciones a los autores, tienen arte, a no dudar.

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  10. Estupendo capítulo, como todos, realmente no dejan de sorprender y amenizar este lugar.
    Adelante, amigos. Es un gusto seguirlos.

    Un fuerte abrazo.

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  11. Aunque el camino me descamine, muy pérdida no andaba yo. Buen uso se hará pues de esa cama sin dosel. Quieran las polillas, las paredes y las sabanas, que por misericordia no hablen, porque de lo contrario el Niño del Corral, será famoso por buenas faenas en los ruedos ¿Y quién sabe donde más?.... Besos, besos, besos, Antoñi

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  12. Linus, Charly, Antoñi, no queda más que esperar a que se desarrollen los acontecimientos, las cartas ya están sobre la mesa... ¡a palpitar lo que se viene!

    ¡Oleeeeeeeeeeeeee!

    Gracias todos.

    Cariños.

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Bienvenidos a "La hostería de Cristófano Buttarelli". Es un honor recibirlos con un vaso de tintillo y todo nuestro afecto. ¡Gracias por vuestra visita!