PRÓLOGO:
En primer lugar quiere este
alma en pena, deciros que los hacedores de “La Hostería de Cristófano
Buttarelli”, hiciéronse conocidos como
iluminados hombres de Letras, y debieron abandonar temporariamente, la
continuidad de las historias que aquí se cuecen. Por ese motivo, y por entender que la
hostería cosechará nuevos amigos a diestro y siniestro, es que daré a conocer
los inicios de estas aventuras.
CAPÍTULO I: DE LOS ORÍGENES DE LA HOSTERÍA
En
un lugar de la Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme, ha
mucho tiempo, habíase asentado un tabernero, hijo y nieto de taberneros, con su
mujer y algunos animales. En aquellas épocas, y merced a la “profesión” que le
venía de arraigo, construyó en estas tierras, una hostería para acoger a los
muchos caminantes que venían recorriendo esos desolados parajes, a quienes les
ofrecían comida y una cama donde pasar las noches. Respecto de estas viandas
hablaremos más adelante por ser materia de gran análisis.
Cristófano Buttarelli era el
nombre del hostelero, Pancracia se llamaba la mujer, ambos rústicos y bastante
dejados en cuanto a las tareas de limpieza, gustaban más de rascarse los
cojones que de asear la pocilga, y créanme que eso de pocilga no era una mera
frase, sino una realidad que picaba tanto como las pulgas que atesoraban los
rincones oscuros de la casa.
Encontrábanse al cabo de un
año, con una clientela considerable, compuesta por campesinos que acudían a
olvidar sus miserables vidas, emborrachándose hasta los tuétanos con el
tintillo especial de la casa, hasta que les brotaba de las orejas.
Un párrafo aparte merece
este vino de origen… de origen incierto, pues en su elaboración, Pancracia y
Cristófano, pisaban las uvas con sus patas sucias luego de darles de comer a
los cerdos, quizá ese bouquet era el
que producía soberanas cagaderas a los parroquianos, quienes no escarmentaban y
volvían una y otra vez.
La hostería, además, ofrecía
un “servicio” de acompañantes para la clientela de paso, era una cohorte de
putas de baja estofa, que de ser de alto rango, jamás se hubiesen atrevido a
desnudarse en esa porqueriza. Pero esto será materia del próximo capítulo.
Aguardad con paciencia…
Ayyyyyyyyyy¡¡¡¡¡ Que yo esto no me lo puedo creer jajajajjj vuelve a abrir la Hostería que grande que grande, yo pensé que ha este matrimonio sanidad ya le había cerrado el negocio para los restos, pero que alegría volver a sentarme en la mesa del rincón donde nadie me ve y con una jarra de ese asqueroso vino partirme de la risa de todo lo aquí esta por pasar y llegar...OS ESPERO A TODOS IMPACIENTEMENTE, BESOSSSSSS¡¡¡¡¡¡¡
ResponderEliminarSíiiiiiiiiiiii, aquí ya está Manuel, a prepararse porque se nos va a partir la quijada de las carcajadas.
EliminarPara Maryta, Manolo y Tomás, verdaderos artífices de la vieja hostería.
ResponderEliminarQueridos amigos y demás parroquianos ¡A por todas!
Recojo el desafío, no estuve muy iluminado yo sino más bien lúgubre. Trabajo toda la noche y duermo como puedo de día. Mi vida cambió a peor, como todo o casi todo en este país. Mi publicación pasó sin pena ni gloria. Qué le vamos a hacer.
ResponderEliminarAquí estaré sin falta.
¡¡Manolooooooooooo!! ¡Qué alegría que estés aquí!
ResponderEliminarOs diré mi querido cofrade, que en mi país también es época de "vacas flacas". pero qué digo: de Vaca Muerta.
Pero no desesperéis que esto no nos hace menos gente, por lo menos nos queda el tesoro de la amistad y de la risa, te diré que casi no puedo esperar a leerte, que de sólo pensarlo ya me brotan las carcajadas...
¡Vaaaaaaaaaaamos todavía!
Besos, abrazos y gratitud.
Abran las puertas, que aquí vengo yo a divertirme con buen humor. Suficiente tenemos de drama y queremos hacer de la vida y nuestra estancia más agradable.
ResponderEliminarEnhorabuena querida Liliana, mucho te he extrañado!
MariCarmen
¡Qué alegría encontrarte MariCarmen! Bienvenida a la hostería, no te sirvo nuestras vituallas porque no son de fiar, jajajaja
ResponderEliminarEspero que te diviertas como lo hacemos nosotros cuando escribimos.
Un beso enorme.
¡¡¡¡¿Cofrade yooooo?!!! Esta sí que no te la perdono Liliana. En estos temas estoy con Stephen Hawking. Además soy metalero, ¿qué sería de mi reputación?
ResponderEliminarEl cofrade y capillita es Salmorelli.
Tenés razón Manuel, pero te he dicho cofrade como quien te dice hermano o colega, jajajajajaja
ResponderEliminar¡No os exasperéis, mi señor! :)
Pardiez que ha tiempo que estaba cerrada tan ilustre tasca. Por fin podré dar termino a mi estreñimiento con ese vino hecho con tanto primor. Y que me dicen vuestras mercedes de esas garrapatas, cucarachas, chinches, pulgas y otros bichos de alta cama, que pululaban por esos lares. Presto estoy a aposentar mis posaderas en cualquier banco de la Hostería para atreverme a comer sus manjares !y que sea lo que Dios Nuestro Señor disponga!. Solo espero que las meretrices sean lo suficientemente promiscuas para hacer olvidar a este triste caballero, venido a menos ultimamamente, de todas las penurias que acaecen.
ResponderEliminarEncender el candil de la puerta, abrid el portón, que mi viejo rocín no ha encontrado cuadra como la del maestro Buttarelli. Y mi huesos están deseando disfrutar de las historias de esa ilustre casa.
Quede con Dios mi Señora
Mi Señor don Naranjito, el candil de la puerta ya brilla por vos esperando veros entrar a la hostería. No os voy a engañar, pues los bichos que tan amorosamente habéis descrito, son huéspedes permanentes de este sitio, pero si tenéis a bien daros un baño con el vino de la casa, los maledicentes picadores estirarán las patas al instante.
EliminarBienvenido y bien recibido seréis siempre que estéis dispuesto.
Que el Señor os bendiga.
Holaaaaaaaaaaaaa!!!! Qué alegría volver a encontrarlos!!!!!! Muy bueno el texto Lili, me divertí a lo pavo, jajajaja Espero los próximos capítulos con ansiedad.
ResponderEliminarBesos para todos: Mary, Tomás, Manuel y por supuesto, mi amiga de siempre, Lili.
Doña Patricia!!!! Veros por estos lares reconforta el ánimo y lo predispone a continuar nuestras historias. Gracias por vuestra vuelta.
EliminarMe inclino ante Vuestra Merced.
El día 13 de octubre, nuestra benemérita amiga Mucha, del blog RECOMENZAR, ha dejado el siguiente comentario, que por alguna brujería no sale de moderación, por tal motivo os lo transcribo:
ResponderEliminar"me encanta esto me deja pensando te siento bien abrazos en ´De donde por fin la joven pierde el virgo y los demás la poca cordura que les pudiese quedar´ "
Gracias, mi Señora, sed bienvenida enbuenahora!!!! Os estaremos esperando...
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